sábado, 13 de abril de 2013

Tapering forzado

Me he creído el rey del mundo, que podía meterme la caña que me he metido justo después de mi primer maratón, y además por montaña, y me ha golpeado la realidad.

Tampoco ha sido para tanto, solo que me he pasado de rosca y lo estoy pagando, pero de los errores se aprende.


La semana pasada entrené 6 días, todos los días a cuchillo. El lunes descansé y salí el martes a hacer series. O a intentarlas. Me tocaban 1+4x1500+1. Ya en el calentamiento me notaba con las piernas muy cansadas y con algo de molestias en los isquios de la pierna derecha, pero lo veía normal, las tengo desde hace tiempo. Cuando me pongo ya con las repeticiones... pffff.... consigo hacer las dos primeras y lo dejo, me duele mucho la pierna y no quiero joderme del todo.

Así que nada, reposo. Salí el viernes por la mañana a hacer 5 km y casi no me dolía y eso que fui apretando. Me ha pasado a 4 semanas de la que sería mi primera carrera de trail, así que me lo puedo tomar como un tapering diferente. Menos volumen, menos ritmo, menos entrenamientos, con fin de llegar entero a la carrera. No me importa el tiempo, solo acabarla. Si me encuentro bien la próxima semana me inscribo, si no, pues para otra.

También me han servido estos días de descanso para llegar más fresco a la Media Maratón de Cáceres, que es mañana. Me sigue molestando, pero muy poco ya. En principio me tienen que entregar el dorsal mañana, porque esta tarde no aparecía en las listas, y eso que me han mandado correos recordatorios... flipo.

Mi objetivo mañana fácil: sin mirar tiempo ni ritmos, a disfrutar que hace buen tiempo y a tomármelo como un entrenamiento de 21 km con 400 metros de desnivel positivo. Y bueno, bajar de las 2 horas si me deja la pierna también.

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